lunes, 29 de noviembre de 2010

Lección 10 Para el 4 de diciembre de 2010: El hombre de Dios: La obediencia no es optativa


Sábado 27 de noviembre

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Éxodo 32; 1 Reyes 13:1-34; Daniel 5:13-17; Lucas 16:31; Juan 15:24; 2 Timoteo 4:3.

PARA MEMORIZAR: “Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo” (2 Ped. 1:20, 21).

ESTA ES UNA DE LAS HISTORIAS más extrañas del Antiguo Testamento: vemos a un rey renegado, un profeta que no debe comer, un altar que se abre como un huevo rajado, un viejo profeta mentiroso y un peligroso león.

La historia transcurre en los primeros años de la monarquía dividida, época de tensión política y religiosa. Bajo el liderazgo de Jeroboam (y con la bendición de Dios, 1 Rey. 11:29-39), las diez tribus de Israel se separaron de Roboam, el hijo de Salomón y heredero del reino davídico. En este tiempo de inestabilidad y cambios, Dios envía a su profeta con un mensaje al rey Jeroboam acerca de la adoración idolátrica en el reino del Norte, que será su ruina.

En este relato de un profeta que no se nombra reside el problema de cuán seriamente considera Dios la obediencia. Aunque haya preguntas sin respuesta, esta historia muestra que cualquier expresión del evangelio sin una obediencia resultante es un evangelio falso.

Domingo 28 de noviembre: LA POLÍTICA DE LA RELIGIÓN

Luego de la muerte de Salomón, el juicio poco sabio de Roboam, su hijo, condujo a la división de la Nación en dos reinos: el rey Jeroboam reinó en Israel, en el norte; y Roboam, en Judá, en el sur (ver 1 Rey. 12).

Poco después de la división, Jeroboam llevó a Israel de la adoración a Dios a la idolatría, actuando por conveniencia política. Creó dos centros de adoración, en Bet-el y en Dan, para facilitar a los israelitas la adoración y que no tuvieran que ir a Jerusalén. Creó los becerros de oro como un recordativo visual de Dios (no una representación), que debían hacer que la adoración fuera más creíble para el israelita común. Este acto político condujo a quebrantar los Diez Mandamientos (Éxo. 20:4, 5).

¿Qué semejanzas hay entre el becerro de oro de Éxodo 32 y los becerros de oro de Jeroboam? Ver 1 Reyes 12:25 al 33.

Es bueno ser innovadores en la adoración y adaptarla a contextos culturales específicos, pero hay que ser muy cuidadosos. Aun una pequeña desviación de un mandato claro de Dios tiene graves consecuencias. En Israel, los becerros de oro llevaron a la Nación hacia el pecado flagrante.

Pero Jeroboam tuvo que hacer también más cambios. Procuró persuadir a algunos levitas locales de que sirvieran como sacerdotes en sus santuarios recién establecidos. Pero ellos vieron los peligros y no quisieron violar los mandatos de Dios; así, Jeroboam se vio obligado a nombrar sacerdotes del pueblo común (1 Rey. 12:31, 32), lo que degradó el sagrado oficio.

Los cambios religiosos-políticos de Jeroboam deberían haber servido como una advertencia a la iglesia cristiana de los primeros siglos del cristianismo; pero les sucedió lo mismo. Los mandamientos divinos se cambiaron debido a influencias políticas o sociales. El domingo en lugar del sábado fue el nuevo día “santo”, para distinguir a la iglesia de los judíos. La veneración de los santos se introdujo para que la adoración a Dios fuera más visual para los creyentes paganos. Estas presiones no existieron solo en el tiempo de Jeroboam o el de los primeros cristianos.

Hoy, como iglesia, afrontamos muchos desafíos similares. ¿Qué clase de presiones culturales está afrontando tu iglesia o tú mismo? ¿Cuán dispuesto estás a comprometerte en cosas “pequeñas”?

Lunes 29 de noviembre: LA ACCIÓN DE DIOS

En medio de las acciones políticas de Jeroboam, Dios interviene y se hace oír por medio de un profeta de Judá, de quien no se da el nombre. Aparece cuando Jeroboam está delante del altar en la ceremonia de dedicación de su santuario. Cualquiera que es “alguien” en el reino de Israel está allí. Dios elige el momento más oportuno para actuar. El resultado es dramático.

Lee 1 Reyes 13:1 al 6. ¿Qué sucedió? ¿Qué lecciones inmediatas recordamos con esta narración?

El profeta, aunque no se da su nombre, es mencionado como un hombre de Dios, título que recibía una persona reconocida como mensajero de Dios. Se usó para Moisés (Deut. 33:1) y para Elías (1 Rey. 17:18). Este título conecta a este profeta con algunos de los grandes profetas del Antiguo Testamento. El hombre de Dios clama contra el altar de Jeroboam y da una profecía, con un nombre específico, Josías (1 Rey. 13:2). Esto es asombroso, porque Josías nacería tres siglos después.

Nos recuerda a Ciro, el persa, mencionado por el profeta Isaías unos doscientos años antes de su nacimiento (ver Isa. 44:28; 45:1). ¿Cuál era el mensaje del hombre de Dios? Primero, el altar que es ilegal, y el profeta predice que un descendiente de David llamado Josías lo destruirá. Esto es lo que Jeroboam más teme: establece centros de adoración para evitar perder su reino en manos de algún descendiente de David.

La segunda parte del mensaje era una demostración del poder de Dios, garantizando el cumplimiento futuro de la profecía. Ante los ojos de todos, el altar se rompe. Tal vez esto les recuerda a los testigos las tablas de los Diez Mandamientos, que Moisés quebró cuando adoraron el primer becerro de oro.

Parece que Jeroboam no aprende nada de la situación. Tiene dos becerros de oro en vez de uno y, en lugar de arrepentirse, Jeroboam señala al hombre de Dios. Señalar con la mano, con una vara o un cetro era siempre una señal de juicio en los tiempos bíblicos: en vez de rendirse a la voluntad de Dios, Jeroboam quiere que arresten al profeta.

En este relato, ¿cómo ves la misericordia de Dios aun hacia alguien tan obstinado como Jeroboam? ¿Cuán a menudo expresas una actitud similar hacia la clara conducción de Dios? ¿Cuáles han sido las consecuencias personales de esa actitud?

Martes 30 de noviembre: EL DADOR DE LOS DONES

Fue un milagro espectacular. La mano de Jeroboam, que “se le secó, y no la pudo enderezar” (1 Rey. 13:4), fue restaurada de inmediato.

Era una evidencia convincente, pero Jeroboam no hizo una confesión pública. Los milagros no pueden cambiar nuestra voluntad. Aun después de la dramática intervención de Dios, es fácil encontrar una explicación “natural” o volver a los viejos hábitos.

¿Qué dijo Jesús acerca de la conexión entre los milagros y la creencia? Lucas 16:31; Juan 10:25 al 28; 15:24. ¿Por qué crees que eso es igualmente cierto hoy?

En lugar de abandonar la adoración falsa y comenzar una reforma, Jeroboam solamente cambió de táctica (ver 1 Rey. 13:7-10). Invitó al hombre de Dios a su casa y le ofreció una recompensa. Esta era una acción política para neutralizar, en el pueblo allí presente, el efecto del mensaje. El Rey le ofreció al profeta un empleo con una recompensa, pero el hombre de Dios nunca estuvo a la venta. Debía su lealtad a Dios y no permitió que el mensaje de Dios fuera modificado por nadie.

Lee 2 Reyes 5:14 al 16, y Daniel 5:13 al 17. ¿De qué manera los profetas respondieron al ofrecimiento de regalos?

Dar un regalo pone al dador en una posición de poder, y el receptor “le debe” algo al dador. El hombre de Dios rehúsa el don del Rey y afirma que no comerá ni beberá en el territorio de Israel. Así, el profeta dice “no” a la mezcla de la verdadera adoración con la idolatría. El pueblo de Dios no debería estar a la venta. El hombre de Dios no tuvo que caminar demasiado, porque el santuario en Bet-el estaba a unos dos kilómetros (1,4 millas) de la frontera con Judá. El siguiente pueblo, ya en Judá, era Mizpa, a unos diez kilómetros (siete millas) de Bet-el. Así, el profeta mostró cuán desagradable es para Dios el sistema idolátrico, al no comer, ni beber y ni siquiera volver por el mismo camino a su casa.

¿Cómo se consideran los regalos o favores en tu cultura? ¿Le debes algo a quien te da un regalo? Ora pidiendo la sabiduría de Dios para que te ayude a liberarte de cualquier situación comprometida en que puedas encontrarte por causa de los regalos que te dieron.

Miércoles 1º de diciembre: MENTIRAS TENTADORAS

La intervención dramática de Dios en la ceremonia inaugural da a la gente común mucho que hablar. Algunos jóvenes van a casa y le cuentan al padre todo lo que vieron. El nombre del padre no se da, pero sabemos que es viejo, y que él mismo es un profeta. Este viejo profeta decide seguir al hombre de Dios y lo encuentra sentado bajo un árbol.

Lee 1 Reyes 13:11 al 19. Compara este pasaje con la primera tentación y mentira de Génesis 3:1 al 5. ¿Qué semejanzas hay y qué podemos aprender de estos incidentes?

El hombre de Dios debió haber entendido que su misión era urgente: dar su mensaje al Rey, que no tomara tiempo para comer o beber y que volviera de inmediato. Sin embargo, aquí está, sentado bajo un árbol en Israel, descansando. Podría haber caminado dos kilómetros y entonces, ya en Judá, haberse sentado bajo un árbol. Al perder su sentido de urgencia, el hombre de Dios se estaba ofreciendo a la tentación.

El viejo profeta engañó al hombre de Dios. No sabemos qué lo motivó para engañarlo, pero la Biblia dice que le mintió (1 Rey. 13:18).

En ese momento, el viejo profeta llegó a ser un agente de Satanás, el padre de la mentira (Juan 8:44). Más perturbador en el relato es que el hombre de Dios se rindió fácilmente. Después de haber sido conducido tan obviamente por Dios y hecho la voluntad de Dios, cae en una trampa y hace lo que Dios le había dicho que no debía hacer.

Es realmente difícil de entender, ¿verdad? Nos gustaría darle una excusa por desobedecer a Dios, ya que fue desviado. Pero Dios nunca excusa la creencia en una mentira cuando la mentira es opuesta a un claro mandato dado por él.

La tentación gira alrededor de la elección de desobedecer la voluntad revelada de Dios. Las tentaciones no cambian tanto como las formas de la tentación. Hebreos 4:15 nos dice que Jesús fue tentado en todo como nosotros. Las mismas tentaciones básicas que afrontamos (aunque estén en disfraces modernos) fueron afrontadas y conquistadas por Jesús. Él nos promete “la salida” para que no nos engañen las mentiras de Satanás (1 Cor. 10:13).

¿Cuán fácilmente permites que la tentación te lleve a un conflicto directo con la voluntad revelada de Dios? ¿Qué elecciones puedes hacer para protegerte de las tentaciones que te atrapan?

Jueves 2 de diciembre: TENTACIONES GEMELAS

El hombre de Dios afrontó dos tentaciones: la primera vino del Rey, y la resistió firmemente; la segunda, a la que sucumbió, vino del viejo profeta. ¿Qué lección importante hay aquí para nosotros mismos? 2 Tim. 4:3; 2 Ped. 2:1; Judas 4-16.

La mayor amenaza a nuestra fe no es la persecución de afuera, sino los falsos maestros que salen de entre nosotros o que pretenden hablar en nombre de Dios.

Es importante tener un mensaje claro de Dios. Necesitamos estudiar la Palabra de Dios por nosotros mismos. Un verdadero profeta o maestro no contradecirá la revelación inspirada, porque Dios no se contradice.

Cualquier enseñanza nueva de Dios se agregará a la verdad establecida y no restará nada de ella; estimulará la obediencia y no la desobediencia.

Además, podemos juzgar a los profetas y a los maestros por los resultados de sus enseñanzas en sus oyentes y en ellos mismos.

Lee 1 Reyes 13:20 al 34. ¿Qué ocurrió enseguida, y qué lecciones hay allí para nosotros?

Es difícil de entender por qué el viejo profeta le mintió al hombre de Dios. Comenzó como Satanás, el engañador, y luego, él es quien le dice el “Así dice Jehová” (vers. 21) al hombre de Dios. Aunque hay cosas difíciles de entender en el relato, hay una que no debería serlo: el hombre de Dios despreció, en forma directa, la clara orden de Dios.

La muerte del hombre de Dios no quedó sin efecto. A diferencia del Rey, que presenció un milagro y siguió con su pecado (ver 1 Rey. 13:33, 34), el viejo profeta creyó que la Palabra de Dios se iba a cumplir.

Les pide a sus hijos que cuando muera pongan sus huesos junto a los huesos del hombre de Dios. La profecía hecha por el hombre de Dios de Judá se cumplió con Josías, tres siglos más tarde (2 Rey. 23:15, 16).

Como se había profetizado, Josías quemó huesos humanos en el altar; sin embargo, no lo hizo con el hombre de Dios, ni con el viejo profeta que fue sepultado junto a él (2 Rey. 23:17, 18).

Considera: “El varón de Dios es, que fue rebelde al mandato de Jehová” (1 Rey. 13:26). ¿Qué mensaje irónico, pero importante, podemos encontrar aquí para nosotros?

Viernes 3 de diciembre

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR:

“El Salvador venció para enseñar al hombre cómo puede él también vencer. Con la Palabra de Dios, Cristo rechazó las tentaciones de Satanás. Confiando en las promesas de Dios, recibió poder para obedecer sus mandamientos, y el tentador no obtuvo ventaja alguna. A cada tentación, Cristo contestaba: ‘Escrito está’. A nosotros también nos ha dado Dios su Palabra, para que resistamos al mal. Grandísimas y preciosas son las promesas recibidas, para que seamos ‘hechos participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que está en el mundo por concupiscencia’ (2 Ped. 1:4).”

“Encareced al tentado a que no mire a las circunstancias, a su propia flaqueza, ni a la fuerza de la tentación, sino al poder de la Palabra de Dios, cuya fuerza es toda nuestra. ‘En mi corazón –dice el salmista– he guardado tus dichos, para no pecar contra ti’. ‘Por la palabra de tus labios yo me he guardado de las vías del destructor’ (Sal. 119:11; 17:4)” (MC 136).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

1. La verdad es progresiva. Al comprender mejor la verdad de Dios, podemos tener que hacer cambios en nuestras vidas, creencias, organización, acercamiento a otros, etc. Mantener lo de siempre no es una opción. Analiza, con tu clase, cómo podemos saber si las acciones que proponemos hacer surgen de la conducción de Dios o de la influencia de la sociedad.

2. Analiza el modelo de Jesús al relacionarse con pecadores frente al deber del hombre de Dios de no relacionarse con el pecado. ¿Cómo nos encontramos con la gente donde ella está? Indica ejemplos prácticos en tu clase, para mostrar cómo te has acercado a la gente y mostrado aceptación sin estimular prácticas pecaminosas.

3. En muchas sociedades, el pago de sobornos, o dar regalos especiales, es parte de casi todo trato comercial, legal o político. ¿Cómo podemos nosotros, como adventistas del séptimo día, individualmente y como iglesia, sobrevivir en tales sociedades? Basados en la lección de esta semana, como clase, escriban algunos criterios para tratar con este problema.

4. Imagínate que alguien en tu iglesia se pone de pie y pretende tener un mensaje de Dios, o que tu primer anciano pretenda tener nueva luz bíblica sobre los eventos finales. ¿Qué harías? ¿Cómo evaluarías esas pretensiones?

domingo, 21 de noviembre de 2010

Lección 9 Para el 27 de noviembre de 2010: Rizpa: La influencia de la fidelidad


Sábado 20 de noviembre



LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Deuteronomio 30:19; 2 Samuel 3:6-11; 21:1-9; Marcos 13:13.


PARA MEMORIZAR:
“Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; escudo y
adarga es su verdad” (Sal. 91:4).

LA HISTORIA DE RIZPA es la de alguien de afuera que desempeña un papel adentro. Solo dos pasajes bíblicos la mencionan explícitamente, y están conectados con el primer tiempo del reinado de David, tal vez antes de la aventura con Betsabé (2 Sam. 11). La mayoría de los comentadores bíblicos están de acuerdo en que 2 Samuel 21 a 24 no sigue en orden después de 2 Samuel 20, sino que proporcionan información adicional que no entra en la línea de la historia de David.


Rizpa existe en los bordes de la historia de David. Como mujer y concubina de un rey anterior, ella tenía pocas opciones. De hecho, su perspectiva parecía sombría y depresiva. Sus dos hijos habían muerto y la familia de su “esposo” fallecido estaba casi aniquilada; no obstante, ella actuó con nobleza, sin lamentar su mala suerte. Su presencia en dos momentos cruciales de la historia de David la hace definidora de reyes y constructora de la Nación.

Todos podemos aprender algo importante de Rizpa: la fidelidad no está condicionada por las circunstancias o por la buena (o mala) fortuna. La fidelidad es un compromiso incondicional para hacer lo que es correcto sin importar el costo.


Domingo 21 de noviembre: LAS CONCUBINAS DEL REY



Hay muchas referencias a concubinas en el Antiguo Testamento (Gén. 25:5, 6; Juec. 8:30, 31; 2 Sam. 5:13-16; 1 Rey. 11:1-3). ¿Qué aprendemos acerca de ellas en estas y otras referencias?


Las concubinas solían ser tomadas de entre las esclavas o las criadas de una familia, para producir herederos y, si tenían descendientes varones, su condición social era similar a las de las esposas regulares. Un hombre era considerado esposo de su concubina (Juec. 20:4), sus hijos aparecían en las genealogías (Gén. 22:24) y recibían parte de la herencia (Gén. 25:5, 6). Nota que las concubinas aparecen mayormente en el período patriarcal; durante la monarquía temprana, ellas estaban conectadas con las casas reales.


Lee 2 Samuel 3:6 al 11. ¿Qué podemos aprender acerca de Rizpa en ese momento específico?


Rizpa (“brasa ardiente”, ver Isa. 6:6, que usa la misma palabra) era parte de la casa real de Is-boset (“hombre de vergüenza”), el único hijo de Saúl que quedaba, a quien Abner puso por rey sobre Israel en Mahanaim (2 Sam. 2:8-10). Se incluye información acerca del padre de Rizpa (“hija de Aja”), lo que sugiere que su familia era importante y que ella no era una esclava. Irónicamente, en la genealogía de Saúl, Is-boset aparece como Es-baal, “el hombre de Baal” (1 Crón. 8:33).

La forma usada en 2 Samuel 2:8 al 10 parece ser un sutil insulto: él es una vergüenza para la casa de Saúl.

Las circunstancias personales de Rizpa no son ideales. Pertenece a la casa de Saúl y, aunque el general Abner apoya al débil Is-boset, Rizpa, como concubina de Saúl, no tiene seguridad. Su suerte parece dirigida por fuerzas y circunstancias más allá de su control.

Jesús dijo que si un hombre codicia a una mujer, ya ha cometido adulterio con ella en su corazón (Mat. 5:28). No obstante, muchos hombres de Dios tuvieron concubinas en el Antiguo Testamento.

¿Cómo conciliamos esto con lo que Jesús dijo? (Recuerda que sólo porque en la Biblia se mencione que algo se practicaba no significa que Dios lo apruebe o que es la mejor manera de vivir.)

Lunes 22 de noviembre: LA MENCIÓN DE SU NOMBRE

La guerra entre David e Is-boset no estaba resultando favorable para este último (2 Sam. 3:1). En contraste con la situación desmejorada en la corte de Is-boset, vemos una lista de los hijos que le habían nacido a David mientras estaba reinando en Hebrón (2 Sam. 3:2-5). La lista refleja la fortaleza creciente de David, pues los hijos significaban un futuro y seguridad.

Fue en ese momento que Is-boset, el “hombre de vergüenza”, acusó a su general, Abner, de haber dormido con la concubina de Saúl (2 Sam. 3:7–10). Abner reaccionó frente a esto, pues era una ofensa muy seria.

Lee los siguientes versículos y explica qué significaba dormir con la esposa o con la concubina de un hombre poderoso en tiempos del Antiguo Testamento. 2 Sam. 16:21, 22; 20:3; 1 Rey. 2:21, 22.


La historia se concentra en Abner e Is-boset, y Rizpa es solo una concubina. El texto bíblico no aclara si Abner realmente durmió con Rizpa a fin de tratar de usurpar el trono. El hecho de que cambiara de bando sugiere que era solo un rumor maligno en la corte real en Mahanaim. Si él realmente quería ser el rey de Israel, ¿hubiera estado tan dispuesto a unirse con las fuerzas de David, el “ungido de Jehová”?

Abner cumplió su amenaza y se unió a David (2 Sam. 3:9, 10, 12). La acusación de Is-boset impulsó al hombre fuerte de Saúl a jurar lealtad a David, lo que marcó la caída de la casa de Saúl. Esto sucedió muy pronto (2 Sam. 4).

La mención del nombre de Rizpa fue lo que efectuó el cambio. Aunque Rizpa no actuó en la narración, ella fue altamente significativa.

Sin la reacción de Abner ante la acusación de Is-boset, la guerra entre las dos casas tal vez habría durado mucho más tiempo. No sabemos qué sucedió con Rizpa después. Ella solo reaparece en las memorias de David en 2 Samuel 21:1 al 14, desempeñando un papel sutil, pero increíblemente importante, al reunir a las tribus y las facciones.

Muy a menudo nos encontramos atrapados en circunstancias que no podemos controlar. ¿Qué cosa podemos siempre controlar, y por qué, al fin, eso es lo más importante? Ver Deuteronomio 30:19 y Marcos 13:13.


Martes 23 de noviembre: ¿OJO POR OJO O UNA SOLUCIÓN CONVENIENTE?

Hubo gran hambre en Israel por un largo período en el que faltó la lluvia (“por tres años”). Esto no era normal. La gente consideraba que Dios era quien daba la lluvia o la retenía. David consultó a Jehová y la respuesta fue que era “por causa de Saúl, y por aquella casa de sangre” (2
Sam. 21:1).



Lee 2 Samuel 21:1 al 6. ¿Por qué los descendientes de Saúl sufrieron por la culpa de su antepasado? ¿No contradice esto Deuteronomio 24:6; Jeremías 31:29 y 30; y Ezequiel 18:1 al 4?


Este tema produce debates entre los eruditos. ¿Dónde está la justicia de Dios aquí? La justicia ¿es colectiva o individual? Algunos comentadores sugieren que David usó el hambre como una excusa conveniente para eliminar rivales al trono, y que la consulta a Jehová en 2 Samuel 21:1 fue una manipulación de los mensajes divinos para los propósitos de David, pero no hay indicaciones de tal motivación. El texto afirma que Saúl procuró aniquilar a los gabaonitas, que estaban conectados con los “amorreos”, los habitantes originales de Canaán.


El texto subraya un principio muy importante: aunque la salvación depende de nuestras decisiones, lo que hacemos y elegimos afecta a quienes nos rodean. Cuando reyes fieles reinaron en Jerusalén, Judá siguió la ley de Dios y procuró vivir de acuerdo con ella; pero los reyes
infieles desviaron a muchos en Israel.

En los textos del Antiguo Testamento, no hay referencias del intento de Saúl de destruir a los gabaonitas. Sin embargo, la venganza de Saúl sobre el pueblo sacerdotal de Nob (1 Sam. 21) sugiere que Saúl era capaz de esto.

El celo de Saúl parece bueno desde afuera (los gabaonitas eran extranjeros), pero la evaluación divina subraya la gran consideración de Dios por la fidelidad (Jos. 9:15-21). Dios desea que cumplamos nuestras promesas, y Rizpa nos da (¡y al rey David!) una lección objetiva de fidelidad.

Aunque no comprendamos por qué hubo hambre a causa de los pecados de Saúl, debemos recordar que nuestras acciones siempre producen consecuencias. Pero ¿no deberíamos evitar hacer lo malo, no por las consecuencias del acto, sino por causa de la maldad del acto mismo? ¿Qué te detiene más: el temor a las consecuencias de tus malas acciones o tu deseo de no hacer lo malo?

Miércoles 24 de noviembre: LA FIDELIDAD ES UNA MANERA DE VIVIR

David aceptó el pedido de los gabaonitas, y se encontraron siete descendientes de Saúl. Aquí aparece Rizpa otra vez. Los dos hijos que tuvo con el rey Saúl están entre los elegidos para ser ejecutados a fin de hacer expiación. En 2 Samuel 21:3 se usa para la palabra hebrea expiación, un término técnico que también se usa para el Día de la Expiación en Levítico 16.

Lee 2 Samuel 21:1 al 9. ¿Cómo hemos de entender este pasaje? ¿Podemos comprenderlo? ¿De qué maneras esto es un ejemplo de que sencillamente necesitamos confiar en Dios, aunque haya algo en las Escrituras que no podamos explicar por completo? ¿Qué otros ejemplos como este (o cosas que no entendamos en su totalidad) puedes encontrar en la Biblia en los cuales, a pesar de nuestra falta de comprensión, necesitamos confiar de todos modos en la bondad y la misericordia de Dios?

David recuerda su promesa a su amigo Jonatán (1 Sam. 20:12-17, 42) y, en consecuencia, no entrega a Mefi-boset, el hijo de Jonatán, a los gabaonitas. Esto enfatiza un punto importante en el texto bíblico: aun cuando Saúl quebró el voto de Israel a los gabaonitas, David cumplió su voto a Jonatán, aun después de muerto este.



¿Qué hizo Rizpa cuando sus hijos fueron muertos? 2 Sam. 21:9, 10. ¿Qué nos indica esto acerca de ella?


El autor enfatiza su alta estima por las acciones de Rizpa al mencionar de nuevo el nombre de su padre (ver 2 Sam. 3:7), en contraste con David, a quien no se menciona como rey ni por su linaje. Solo podemos imaginar el dolor y el duelo de Rizpa mientras vigila los siete cuerpos ejecutados.

Ella construye una especie de tienda con cilicio, y allí, al aire libre, acampa cerca de los cuerpos en descomposición, y los protege de ser profanados por aves y animales.

Rizpa no hace esto por un día ni por siete días, sino que vigila varias semanas, hasta que comienzan a caer las lluvias de otoño.

Rizpa es una madre devota y se destaca como un ejemplo de fidelidad en medio de una historia dominada por hombres que no siempre fueron fieles.


Jueves 25 de noviembre: EDIFICANDO UNA NACIÓN

La fidelidad de Rizpa llama la atención de David, e incluye el origen de Rizpa. Ella no es una madre cualquiera; es la hija de Aja y la concubina de Saúl. Ella está en el “monte delante de Jehová”, cerca de los siete cuerpos, y esto impulsa a David a ordenar una sepultura digna para Saúl, Jonatán y los descendientes de Saúl.

Lee 2 Samuel 21:11 al 14. ¿Cómo fue afectado David por las acciones de Rizpa?


Los vecinos de Israel creían que un entierro adecuado era esencial para que los muertos llegaran al lugar donde los dioses los juzgaban. Las pirámides de Egipto son tumbas enormes, que muestran la importancia de las sepulturas allí. En contraste, las sepulturas israelitas eran muy sencillas, porque para ellos la muerte era un estado de inconsciencia (Ecl. 9:5, 6). Este funeral, sin embargo, es muy significativo, ya que señala el fin de las peleas entre las tribus y pone el fundamento de un Israel unido.

Lee otra vez 2 Samuel 21:1 al 14. ¿Cuál fue la causa del fin del hambre?


El hambre no cesa con la ejecución de los siete descendientes de Saúl. Dios responde al clamor de la tierra solo después de que David llevara los restos de Saúl y sus descendientes a una tumba digna. Es decir, aunque la justicia es un elemento de nuestra interacción mutua, también se requiere la reconciliación. El ejemplo de fidelidad de Rizpa produce fidelidad y reconciliación, y resulta en un Israel que comienza a sanar las heridas producidas por una guerra entre tribus.

Aún hoy, el papel de Rizpa enseña una lección importante: las circunstancias solas no hacen o quiebran a un hijo de Dios; más bien, nosotros elegimos, para bien o para mal, si seremos títeres o si nuestra fidelidad influirá en las vidas de quienes nos rodean. Viviendo con fidelidad, Rizpa sutilmente influyó sobre la vida de una nación.

Considera el poder del ejemplo: las acciones de Rizpa, concubina del enemigo de David, influyeron sobre David. ¿Qué nos debería señalar esto acerca del poder de nuestra influencia? ¿De qué modo podrías ser una mejor influencia de lo que eres ahora?

Viernes 26 de noviembre

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR: “El evangelio es un mensaje de paz. El cristianismo es un sistema que, de ser recibido y practicado, derramaría paz, armonía y dicha por toda la tierra. La religión de Cristo unirá en estrecha fraternidad a todos los que acepten sus enseñanzas. La misión de Jesús consistió en reconciliar a los hombres con Dios, y así a unos con otros” (CS 50, 51).

“Una cosa es leer y enseñar la Biblia, y otra cosas es tener, por la práctica, sus principios santificadores y dadores de vida injertados en el alma. Dios está en Cristo, reconciliando al mundo consigo. Si los que pretenden ser sus seguidores se apartan, no mostrando un interés afectuoso y compasivo los unos por los otros, no son santificados por Dios. No tienen el amor de Dios en sus corazones” (R&H, 17 de marzo de 1910).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

1. En tu clase de Escuela Sabática, piensa en maneras de demostrar la fidelidad de Dios a las personas de tu comunidad que no conocen a Jesús personalmente.

2. ¿Qué es fidelidad? Pide a diferentes miembros de tu clase que definan fidelidad, usando personajes bíblicos como ejemplos de fidelidad.

3. Muchas veces parecemos impotentes y sin poder elegir qué hacer en ciertas circunstancias. ¿Qué podemos aprender de una mujer como Rizpa, quien, a pesar de sus circunstancias, actuó tan fielmente delante de Dios?

4. ¿Hombres de Dios con concubinas? ¿Los descendientes sufren por los pecados de sus padres? Esta historia le deja al lector moderno muchas preguntas sin responder. Por supuesto, como con todas las cosas de la vida, siempre hay preguntas sin respuestas. Parte de lo que significa vivir por fe es vivir con preguntas no respondidas (Después de todo, si todas las cosas fueran respondidas, ¿dónde habría necesidad de tener fe?). 

¿Cómo has aprendido a vivir con preguntas sin respuestas en tu propia existencia? ¿Qué aprendiste al no tener respuestas, que puede ayudar a otras personas que luchan con preguntas que esperan respuestas, que por el momento no llegan?

5. Medita más en el poder del ejemplo. ¿Quiénes son ejemplos poderosos en tu cultura y en tu sociedad? ¿Son buenos o malos ejemplos? ¿Qué sucede con tu propio ejemplo? ¿Qué clase de influencia crees que tienes sobre los que observan tu conducta? ¿Cuán diferente es tu ejemplo en casa de tu ejemplo en público o en la iglesia? Los que tal vez admiran tu ejemplo en público ¿qué dirían si te vieran en tu casa?

domingo, 14 de noviembre de 2010

Lección 8 Para el 20 de noviembre de 2010: Joab: El débil hombre fuerte de David


Sábado 13 de noviembre


LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: 2 Samuel 2:17-23; 3:23-27; 11:15-25; 20:7-11; 1 Reyes 1.


PARA MEMORIZAR:


“Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; pero Jehová pesa los corazones” (Prov. 21:2).


LA HISTORIA DE JOAB es un relato sobre política, poder, intriga, lealtades mal dirigidas, celos y tozudez. La época Joab era un tiempo cuando la supervivencia no estaba garantizada por una administración central fuerte y un plan de jubilación. La gente fuerte sobrevivía; las personas débiles desaparecían. Fue durante el mandato de Joab como caudillo de David que Israel llegó a ser realmente una nación. Después del feudalismo de clanes y la rivalidad tribal que caracterizó el período de los jueces, la figura del rey, que comenzó con Saúl y, luego, fuertemente, con David y Salomón, unió a Israel. Aunque siglos de pensar en clanes no se revierten en unas pocas décadas. La vida de Joab, como dice la Biblia, fue arruinada por guerras, feudos y aun genocidios.


Aunque no estemos involucrados en esa clase de cosas, podemos encontrar algunos aspectos feos de nuestro propio carácter cuando miramos la historia de Joab. Es por medio del ejemplo negativo de Joab –el débil hombre fuerte de David– que podemos identificarnos con algunas faltas de carácter y buscar la única respuesta para ellas: Jesús.


Domingo 14 de noviembre: UN ASUNTO DE FAMILIA


Aun cuando Joab, vinculado con la familia de David (ver 1 Crón. 2:13-17), estaba a cargo de las tropas de David, captamos una vislumbre de su verdadero carácter en 2 Samuel 2 y 3. Al morir Saúl y Jonatán en la batalla, Judá designó a David como rey. La contraparte de Joab, en el ejército de Saúl, era Abner, quien de alguna manera sobrevivió a la batalla en la que Saúl y sus hijos habían caído.


Abner y David tenían una historia. Abner había dirigido las tropas de Saúl en varias persecuciones a David y ahora no aceptaba como rey al hombre que él antes había perseguido. Por eso, él puso a Is-boset (vers. 8, 9), el cuarto hijo de Saúl, en el trono de Israel, y comenzó una guerra contra Judá y David. Aunque Israel era numéricamente más fuerte, el reino de David siguió fortaleciéndose.


Lee 2 Samuel 2:17 al 23, y resume lo que sucedía.


Durante la escaramuza, Asael, el hermano menor de Joab, en forma imprudente persiguió a Abner. Este le advirtió repetidamente que desistiera, pero el atolondrado joven no quiso oír, y Abner mató a Asael en defensa propia. Joab nunca olvidó esto.


Después de un tiempo, Abner notó que la situación de Is-boset no era buena, dado que era un rey muy débil. Entonces, se acercó a David y se ofreció para hacer volver las demás tribus a él (2 Sam. 3:1-22).


Entretanto, Joab había estado lejos. Cuando regresó al hogar y se enteró de los nuevos acontecimientos, estos lo perturbaron mucho.


¿Cómo manejó Joab este cambio que él no había iniciado? 2 Sam. 3:23-27. Contrasta lo que Joab le dice a David con la razón por la que Joab mata a Abner. Lee también 2 Samuel 3:30. ¿De qué modo intenta Joab describir los motivos de Abner? ¿Qué revela esto acerca de él?


Tal vez Joab realmente creía que estaba actuando en favor de los mejores intereses de David cuando mató a Abner. Esto destaca un punto importante: piensa en tus acciones. ¿Cuáles son las verdaderas razones para hacer ciertas cosas en oposición a las razones que usas para justificarlas en tu propia mente? ¿Cómo puedes aprender a conocer la diferencia entre las dos?


Lunes 15 de noviembre: EL COSTO DEL PECADO


David parece no hacer nada por el asesinato de Abner, aun cuando públicamente lamenta a Abner y reprende las acciones de Joab (ver 2 Sam. 3:28-35). Para evitar futuras represalias, Joab trata de congraciarse con David lo más posible y trata de hacerse indispensable. Está listo para hacer los trabajos sucios para David, pero no se concentra en hacer lo correcto, lo que involucró violar su conciencia. Si esto ocurre varias veces, la voz de la conciencia llega a ser más suave cada vez, hasta que somos incapaces de tomar decisiones firmes.


El pecado también afecta la credibilidad. Vemos este principio varias veces en la vida de David. Por causa de su pecado con Betsabé y contra Urías, David es incapaz de disciplinar a sus hijos. Cuando su hijo mayor viola a su media hermana (2 Sam. 13), y su segundo hijo llega a ser un homicida (2 Sam. 13:23-39), David observa impotente, sabiendo que él es culpable de pecados similares.


Lee 2 Samuel 11:15 al 25. ¿Qué nos indica este pasaje acerca de Joab?


Joab tiene el mismo problema. Con la sangre de Abner en sus manos, es incapaz de reaccionar y ayudar a salvar la vida de un buen hombre.


Y Joab añade, a la lista de sus crímenes, el asesinato de Urías. Nota, en 2 Samuel 11:17, que Urías no es la única víctima. Joab envía a otros hombres junto con él con el fin de que todo parezca más auténtico.


Aunque Dios es misericordioso y nos perdona cuando nos arrepentimos, como sucedió con David, la falta de credibilidad y de integridad es algo que seguimos llevando con nosotros.


Aquí Joab obedeció las órdenes de David. Ahora lee 2 Samuel 18:5 al 15. ¿Qué nos indica esta acción acerca de él? ¿Cómo podría haber racionalizado también esto?


Nota que Joab seguía las órdenes de David aun cuando violaran los mandatos de Dios, pero no tenía dificultades en desobedecerlas si podía sacar ventajas personales. Si Absalón hubiese tenido éxito en su revuelta, probablemente Joab también habría muerto (2 Sam. 19:5, 6). Joab parece no haber cuidado de nadie, sino solo de sí mismo. Es fácil caer en la misma trampa, ¿verdad?


Martes 16 de noviembre: JOAB, EL POLÍTICO


En 2 Samuel 13, se cuenta la historia del asesinato premeditado de Amnón por Absalón, su medio hermano. Luego, Absalón huyó del país.


Amnón era culpable de violar a su media hermana Tamar, la hermana de Absalón. Parecería que David –paralizado por el recuerdo de su propio pecado– había sido incapaz de administrar justicia. Absalón tomó la justicia en su mano, y vengó la violación de su hermana matando a Amnón y restaurando el honor de su familia. (Honor y vergüenza eran elementos importantes en la escala de valores en tiempos de David.)


Como un beneficio adicional, ahora que el hermano mayor, Amnón, estaba muerto, Absalón quedó como el siguiente en la línea de herederos al trono. El corazón de David estaba desgarrado entre el dolor por su hijo muerto, su amor por Absalón y el reconocimiento de que todo ese problema, de algún modo, era consecuencia de su propio pecado.


En medio de todo esto, Joab decidió involucrarse y, como no veía el modo de poner este asunto en la agenda del rey David, recurrió a la astucia y usó a una sabia mujer de Tecoa.


Lee 2 Samuel 14. ¿Qué comunica esta historia acerca del amor y el perdón de Dios? Al mismo tiempo, ¿qué nos indica aquí acerca de Joab?


El relato que Joab pone en boca de la mujer sugiere que él conocía el amor de Dios por el pecador. Su teología era correcta, pero, desgraciadamente para Joab, era solo un conocimiento intelectual. Su vida se caracterizó por venganzas y falta de perdón. Llegó a ser inmune al amor de Dios en su propia vida. Para él, todo, aun la religión, tenía un fin político y podía ser usado para la promoción propia. Joab reconocía el potencial de Absalón y quería congraciarse con el futuro rey. Sin embargo, parece que Joab encontró un igual en Absalón, ya que Absalón podía ser tan astuto y peligroso como lo era Joab. Hizo esto al quemar los campos de Joab a fin de forzarlo a arreglar una reunión con David (2 Sam. 14:28-33). Debido a esta interferencia de Joab, el escenario se preparó para una horrible rebelión que llevó a la guerra civil.


¿Cuán fácil es permitir que la ambición personal, el orgullo y el deseo de supremacía personal motiven tus acciones? ¿Cómo puedes aprender a reconocer estas cosas en ti mismo? ¿Cómo puedes, por la gracia de Dios, derrotarlas antes de que te lleven a la ruina?


Miércoles 17 de noviembre: VIVIENDO POR LA ESPADA


Lee 2 Samuel 20. ¿Qué papel desempeña Joab otra vez? ¿Cómo se justifica la traición de Joab?


Amasa y Joab eran primos (2 Sam. 17:25). Amasa comandaba las fuerzas de Absalón. Después de que Joab desobedeció las órdenes de David en el caso de Absalón (2 Sam. 18:5, 14), David deseaba librarse de Joab y le prometió a Amasa el alto mando de su ejército (2 Sam. 19:13).


Después de todo, fue la conspiración y la planificación de Joab lo que preparó el escenario para la rebelión. Obviamente, el propósito de David no estaba motivado únicamente por el enojo contra Joab (quien había desobedecido conscientemente la orden del Rey y había matado a su hijo). La designación de Amasa también era una maniobra política que señalaría la reconciliación con el resto de las fuerzas favorables a Absalón.


¿Qué nos informa 2 Samuel 20:1 y 2 acerca de la situación política en Israel?


David ignora a Joab, al prometerle el mando a Amasa, y ahora envía a Amasa a reunir a las tropas a fin de tratar con la nueva revuelta. Amasa no alcanza a hacerlo esta vez. David envía, entonces, a buscar a Abisai, el hermano de Joab, y se vuelve a él y no a Joab en este momento de crisis. Joab y Amasa finalmente se encuentran y, repitiendo lo que le había hecho a Abner, Joab mata a Amasa. El autor bíblico enfatiza que el ataque (2 Sam. 20:8-10) es totalmente inesperado. Joab, fríamente, asesina a su primo, solamente porque él ya no era el número uno.


Uno de los hombres de Joab trata de legitimar estas acciones vinculando a Joab con el rey David. La gente es llevada a creer que ser leal a David significa ser leal a Joab (aun cuando el Rey esté distanciado de Joab), y ser leal a Joab significa que no se puede poner en duda el que Joab tenga el derecho de ser juez y ejecutor en el caso de Amasa.


Considera la duplicidad de Joab en la manera en que traicionó a Amasa. Cuán cuidadosos tenemos que ser para que no traicionemos a alguien que confía en nosotros, usando esa confianza para tratar con él con maldad. Cuán fácilmente podría aplicarse aquí Mateo 7:12.


Jueves 18 de noviembre: LA ÚLTIMA POSICIÓN DE JOAB


El momento parece perfecto. David ya era un hombre muy anciano, que no podía mantener el calor corporal por las noches. Se designó a una hermosa joven como asistente personal del rey David. El autor bíblico enfatiza el hecho de que David no tuvo relaciones sexuales con ella (1 Rey. 1:1-4), lo cual subraya la debilidad del Rey. David no “conoció” a la joven Abisag, y tampoco sabía lo que sucedía en su reino. Adonías, el mayor de los hijos que quedaban, decidió que era el tiempo de ser coronado.


Lee 1 Reyes 1. ¿En qué está metido Joab ahora? ¿Qué más nos dice esto acerca de él?


Por 1 Reyes 1:7, vemos que Joab es clave en este intento golpista. Joab, como lo había hecho antes, fue adelante y actuó, pensando que el viejo rey David no podría reaccionar. Sin embargo David, con la ayuda de Betsabé y del profeta Natán, actuó. Anuló los planes de Joab y de Adonías, y declaró públicamente que Salomón era su corregente.


Joab parece tener a Dios fuera de su ecuación. Seguramente conocía a Dios, pero no le daba importancia en su vida. Joab pensaba que él podía vivir como quería y escapar de las consecuencias. Se olvidó de que Dios no era David y que no podía ser burlado. La retribución puede no venir de inmediato, pero un día llegará en esta vida o en el Juicio Final. A menudo, al final de esta vida, aun si es muy larga, “el hombre [...] eso también segará” (Gál. 6:7).


Antes del Juicio Final, siempre hay misericordia. Joab tiene su última oportunidad: Salomón no lo castiga por conspirar con Adonías y le permite retener su cargo. Pero Joab no pide disculpas y se involucra en otro atentado. Cuando este no funciona, Joab finalmente se da cuenta de la gravedad de su situación. Huye al Santuario y se aferra de los cuernos del altar. Pero Joab se olvida de que el altar provee asilo solamente a los que inconscientemente mataron a alguien (Éxo. 21:14). El pasado no confesado de Joab finalmente lo atrapa. El hombre que vivió por la espada muere por la espada (1 Rey. 2:28-35).


Aunque Joab fue maquinador, ambicioso y engañador, podría haber sido perdonado por Dios si se hubiera acercado a él con fe, humildad y arrepentimiento. ¿Qué sucede contigo y con tus defectos? El perdón está allí, si estás dispuesto a reclamarlo.


Viernes 19 de noviembre


PARA ESTUDIAR Y MEDITAR: “No solo debemos aferrarnos de la verdad, sino permitir que ella nos aferre a nosotros; y de este modo tener la verdad en nosotros y nosotros en la verdad. Y si este es el caso, nuestras vidas y nuestros caracteres revelarán el hecho de que la verdad está logrando algo por nosotros. [...] La verdad que sostenemos es del Cielo y, cuando esa religión encuentra alojamiento en el corazón, comienza su obra de refinar y purificar; porque la religión de Jesucristo nunca hace que un hombre sea áspero y rudo, nunca lo hace descuidado o de corazón duro, sino que la verdad de origen celestial, la que proviene de Dios, eleva y santifica al hombre; lo hace cortés, bondadoso, afectuoso y puro; le quita el corazón duro, su egoísmo y su amor al mundo, y lo purifica del orgullo y de la ambición impía” (ST 1:66).


PREGUNTAS PARA DIALOGAR:


1. ¿Cuán lejos debemos ir en nuestra expresión de lealtad a nuestras familias, a nuestros empleadores y a nuestro país? ¿Cuáles son los límites de estas relaciones importantes?


2. Lee la cita de Elena de White en la sección del viernes. ¿Qué evidencia ves, en tu vida, de que la verdad ha tomado posesión de ti? Aunque es importante concentrarnos en Cristo y no en nosotros, también necesitamos ser honestos y ver dónde nos encontramos con respecto a la fe (2 Cor. 13:5).


3. En la historia, muchos dijeron: “Solamente cumplía órdenes”, e hicieron actos malvados. ¿De qué modo, como cristianos, debemos actuar en situaciones en las que se nos ordena hacer cosas que sabemos que están mal? Más importante, ¿cómo podemos desarrollar la fe que necesitamos para estar firmes, aunque signifique desafiar órdenes que podrían costarnos caras a nosotros y a nuestros amados?


4. ¿Es posible perdonar y olvidar cuando hemos sido heridos? ¿Qué principios podemos aprender acerca del perdón, de la falta de perdón y de las consecuencias de no perdonar?


5. El magnate del petróleo John D. Rockefeller usaba prácticas comerciales inescrupulosas a fin de comprarles los negocios a los competidores. Justificaba sus acciones diciéndoles que le vendieran sus compañías a él y que él correría con los riesgos del negocio del petróleo por ellos. “Entren al arca”, les decía, haciendo parecer que hacía algo muy bondadoso hacia ellos cuando, de hecho, se los estaba tragando. ¿Qué lecciones podemos aprender de esto acerca de cuán fácil es justificar acciones inmorales?

lunes, 8 de noviembre de 2010

Lección 7 Para el 13 de noviembre de 2010: Abiatar: El sacerdote


Sábado 6 de noviembre

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Éxodo 28:6; 39:2-7; 1 Samuel 21:1-9; 22:6-23; 2 Samuel 15:13-29.

PARA MEMORIZAR:
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable” (1 Ped. 2:9).

LOS SACERDOTES FUERON MUY IMPORTANTES en la vida y en la historia de Israel, y también en las naciones vecinas. En Mesopotamia, el rey era un sacerdote, y reunía el poder político con el religioso. Los sacerdotes representaban grandes intereses en la corte, y muchas veces designaban a los reyes. En el Antiguo Testamento, el sacerdocio era central en la vida de fe de Israel, y su influencia llegó al Nuevo Testamento.

El sacerdocio de todos los creyentes (1 Ped. 2:9), destacado en la Reforma Protestante, no es solo un concepto del Nuevo Testamento (ver Éxo. 19:6). El ideal de Dios siempre fue que los creyentes fueran santos, y sirvieran a otros intercediendo por ellos y comunicándoles la salvación.

Ahora veremos la historia de Abiatar, que nos brinda algunas vislumbres del sacerdocio del Antiguo Testamento y nos cuenta que el sacerdocio no se basa solo en el linaje o en la educación, sino en el compromiso personal con el Señor. Y, a veces, las elecciones equivocadas también pueden descalificar a un miembro del sacerdocio.

Domingo 7 de noviembre: MENTIRAS Y TRAGEDIA

Lee 1 Samuel 21:1 al 9, y 1 Samuel 22:6 al 23. Luego responde las siguientes preguntas:

1. ¿Qué mentira le dijo David a Ahimelec acerca de por qué se encontraba allí?


2. ¿Qué le sucedió a Ahimelec como resultado de su confianza en David?


3. ¿De qué modo trató Saúl de lograr que sus propios hombres se volvieran contra David? ¿Qué clase de argumento usó?

4. ¿De qué modo respondió Ahimelec a Saúl con respecto al carácter y la fidelidad de David?

5. ¿Qué nos enseña este relato acerca de cuánto había caído Saúl, y cuán degenerado y vengativo había llegado a ser?

6. ¿Por qué crees que Doeg, un extranjero, hizo lo que los siervos de Saúl rehusaron hacer?

7. ¿De qué manera respondió David a la noticia de la masacre? ¿En qué forma su respuesta era correcta?

8. ¿Qué promesa hizo David al único hijo de Ahimelec que alcanzó a escapar de la matanza?

Considera el contraste, en esta historia, entre la honra y la deshonra, entre la fidelidad y la falta de fidelidad. Considera el desastre que produjeron la deshonestidad y el pecado. ¿Qué clase de preguntas morales afrontas ahora mismo? ¿Qué clase de elecciones morales tienes que hacer? Piensa en las consecuencias de tus acciones antes de que hagas esas elecciones.

Lunes 8 de noviembre: ABIATAR, EL SACERDOTE

No se dice cómo escapó Abiatar de la matanza de su familia. Solo se dice que escapó y que fue hasta donde estaba David. Sin embargo, antes de huir, Abiatar alcanzó a salvar el efod (1 Sam. 23:6), una vestimenta sagrada que usaban los sacerdotes (ver Éxo. 28:6; 39:2-7), para buscar la voluntad de Dios cuando debían tomar decisiones. En dos ocasiones, se informa que David llamó a Abiatar y consultó con el efod (1 Sam. 23:9-12; 30:7, 8).

En contraste con nosotros hoy, la gente en los días de Abiatar tenía poco acceso a la revelación escrita de Dios. Había pocas copias manuscritas del libro de la Ley (el Pentateuco), y la mayor parte de la gente no tenía oportunidad de estudiar la Palabra de Dios. Hoy tenemos acceso a la Biblia por nosotros mismos. Dios nos promete al Espíritu Santo para explicarnos su Palabra (Juan 14:26). Dios también usa a personas consagradas para darnos consejos piadosos (Prov. 20:18) y actúa por medio de las circunstancias (Rom. 8:28).

¿Cuáles eran algunas de las funciones de Abiatar como sacerdote? 1 Sam. 23:9-13; 2 Sam. 15:24; 17:15-22.

Además de cumplir estos roles, Abiatar, al igual que David, era un refugiado sin hogar y estaba escapando constantemente. Él podía comprender las frustraciones y los temores que David y sus hombres debieron haber sufrido frente a la continuada persecución.

El tema de la identificación personal con alguien es importante en el concepto de sacerdocio en el Nuevo Testamento. El autor de Hebreos nos dice que Jesús es nuestro Sumo Sacerdote porque puede empatizar plenamente con nosotros (Heb. 2:17).

Lee 1 Pedro 2:9. El Nuevo Testamento claramente enseña que todos nosotros tenemos la responsabilidad de ser sacerdotes en nuestras comunidades. El llamado no lo originamos nosotros. Jesús dijo: “No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé” (Juan 15:16). Este llamado no nos convierte en sacerdotes del Antiguo Testamento o en apóstoles del Nuevo Testamento, pero nos desafía a interceder por nuestras familias, por nuestras comunidades y por los que nos rodean. ¿Cómo puedes servir mejor al ser un “sacerdote”?

Martes 9 de noviembre: LA REVUELTA DE ABSALÓN

En 2 Samuel 15 al 18, se nos cuenta la triste historia de Absalón, el hijo de David que se rebeló contra su padre. Cuando el ejército de Absalón estaba en camino hacia Jerusalén, David decidió huir, y así evitar derramamiento de sangre. Todos los fieles seguidores de David se alistaron para huir con él, y Abiatar también se preparó para salir con David.

Lee 2 Samuel 15:13 al 29. ¿Qué nos enseña este pasaje acerca del carácter de David, aun en tiempo de peligro? ¿Qué lugar ocupa Abiatar en este episodio?

Tomando el Arca de Dios, Abiatar y los sacerdotes se prepararon para dejar la ciudad, pero David ordenó que se quedaran. David sabía que llevar el símbolo de la presencia de Dios no significaba que Dios estuviera con él. Llevar una cruz, exhibir un lema religioso, o guardar una serie de reglas no garantiza la presencia o la aprobación de Dios. Dios no puede ser manipulado. El Arca debía permanecer en su lugar, y esta decisión fue un acto de fe. David confiaba en que Dios lo salvaría y lo llevaría de vuelta a Jerusalén.

El Arca de Dios fue devuelta, y Abiatar ofreció sacrificios (2 Sam. 15:24) hasta que el pueblo terminó de salir de la ciudad. En ese momento, los sacerdotes Abiatar y Sadoc eran los ojos y los oídos de David en la ciudad, y los hijos de Abiatar y de Sadoc esperaban mensajes fuera de Jerusalén. Las personas no son lo que parecen ser. Una sierva llevó un mensaje a los jóvenes, y un muchacho que vio lo que pasaba se lo contó a Absalón. Los hijos de los sacerdotes fueron perseguidos por los hombres de Absalón, pero encontraron un simpatizante, que los bajó a un pozo. Su esposa hizo que las cosas parecieran lo que no eran al tender una tela sobre el pozo y esparcir granos sobre ella, lo que nos recuerda cómo Rahab escondió a los dos espías bajo unas gavillas de lino (2 Sam. 17:15-29; Jos. 2:6).

En nuestro propio contexto, las cosas a menudo tampoco son lo que parecen. Muchos corazones doloridos se esconden detrás de una sonrisa. Como seguidores de Cristo, somos sus representantes. Llegamos a ser las manos de Dios para alcanzar a los que nos rodean. Debemos ser abiertos y sensibles para ver cómo son realmente las personas, más allá de las apariencias y las situaciones, y debemos estar dispuestos a sacrificar algo de nosotros para ayudarlas.

Miércoles 10 de noviembre: LA ELECCIÓN DE ABIATAR

No tenemos registro de las opiniones personales, políticas o religiosas de Abiatar. Todo lo que de él se dice está registrado como palabra de Dios para David. Pero, sus acciones hablan más alto que sus palabras. Aun cuando no se registra que haya dicho nada, su presencia es una afirmación
poderosa.

En el tiempo de David, el hijo primogénito era considerado, tradicionalmente, como el principal heredero de su padre. Para un rey, esto significaba que el primogénito heredaría el trono. Sin embargo, Dios no está atado por la tradición. En realidad, durante la historia de Israel, él a menudo pasó por alto a los primogénitos para llamar a otros, a veces por decreto divino, y otras por las circunstancias y las elecciones de los primogénitos mismos (ver Gén. 4:1-5; 21:8-12; 25:21-36; 48:8-19; 1 Sam. 16:6-12).

Lee 1 Reyes 1:1 al 8. Abiatar fue leal a David. ¿Qué lo pudo haber llevado a hacer lo que hizo allí?

Salomón no era el hijo mayor y, por costumbre, no habría sucedido a su padre como rey. El hijo mayor, Amnón, fue muerto por su hermano Absalón. A su vez, Absalón había muerto durante su fracasado atentado.

Y el cuarto de los hijos, Adonías, sintió que el trono le pertenecía por derecho. Adonías se puso de acuerdo con Joab y Abiatar, y ellos le dieron su apoyo (1 Rey. 1:7).

Salomón era menor que Adonías. Su madre era Betsabé, la ex esposa de Urías heteo, que fue asesinado a fin de cubrir el incidente de David con Betsabé. Pero, a pesar de este trasfondo vergonzoso, Salomón fue amado por Dios (2 Sam. 12:24), y Dios lo eligió para ser el sucesor de David (1 Crón. 22:9, 10). Frente a esta decisión incómoda, tal vez Abiatar no pudo reconciliarse con el escándalo público que la elección causaría, y se apoyó en la tradición en lugar de seguir la voluntad revelada de Dios.

La tradición puede ser muy cómoda, ya que nos evita tomar la responsabilidad de pensar las cosas a la luz de la voluntad de Dios. Es mucho más fácil y “seguro” decir: “Siempre lo hemos hecho así”.

¿Cuán a menudo permitimos que la tradición se ponga en el camino de la conducción de Dios? Al mismo tiempo, ¿por qué debemos ser cuidadosos de no juzgar las cosas como mera “tradición” y luego desatenderlas?

Jueves 11 de noviembre: LA SUERTE DE ABIATAR

Después de la muerte de David y el ascenso de Salomón al trono, hubo problemas que resolver. Después de que Adonías fue asesinado (1 Rey. 2:13-25), todavía estaba el problema de Abiatar, el sacerdote, quien fue fiel sirviendo al padre de Salomón. ¿Qué se habría de hacer por su parte en la insurrección?

Lee 1 Reyes 2:26 y 27. ¿De qué modo trató Salomón a Abiatar, y qué razones dio?

El versículo puede dar la impresión de que Abiatar fue despedido por una profecía hecha a Elí más de cien años antes (1 Sam. 2:30-36).

Pero, realmente, esta es una demostración de cómo Dios conoce nuestras futuras elecciones libres. Dios sabe qué elección haremos nosotros, y es capaz de profetizar el futuro. Dios sabía que, así como los hijos de Elí se descalificaron para el oficio de sacerdotes por su conducta, su descendiente Abiatar también se descalificaría como sacerdote, al no querer aceptar las elecciones de Dios.

Lee Mateo 26:14 al 16 y 20 al 25. Explica esta predicción a la luz de la destitución de Abiatar del sacerdocio. ¿Qué principio similar actúa en ambos casos?

Aunque Jesús sabía que Judas lo traicionaría, no lo rechazó. Judas fue incluido en el círculo de los Doce y experimentó el poder de Dios de primera mano. Pero Judas, como Abiatar, no estaba preparado para aceptar la voluntad de Dios. Él compartió con Abiatar algunas ideas acerca del Reino, y de cómo deberían manejarse los temas del poder y los controles. Judas quería ver a Jesús como rey terrenal. Frustrado, buscó a los escribas y a los fariseos, y traicionó a su verdadero Rey.

El preconocimiento divino no significa predestinación divina. La gente tiene posibilidades de elegir, como las tuvieron Judas y Abiatar.

El preconocimiento que tiene Dios de las elecciones no limita nuestra libertad de hacerlas. La libre elección es uno de los dones más sagrados de Dios. Tuvo un gran costo: la muerte de Jesús en la cruz. (Si no tuviéramos la libertad de elegir, no habríamos elegido pecar, y Jesús no hubiera tenido que morir por nosotros.) ¿Analizas y oras ante las decisiones que tienes que hacer?.

Viernes 12 de noviembre

PARA ESTUDIAR Y MEDITAR: “Dios lo ha elegido para que realice una obra grandiosa y solemne. Ha estado procurando disciplinarlo y probarlo, para refinarlo y ennoblecerlo, para que haga esta obra sagrada teniendo en cuenta solamente su gloria, la cual pertenece plenamente a Dios. Cuán admirable es que Dios elija a un hombre y lo ponga en estrecho contacto con él, y le confíe una misión, un trabajo, que él debe hacer. Un hombre débil es fortalecido, un hombre tímido es hecho valiente, el irresoluto llega a ser un hombre de rápida y firme decisión. ¡Cómo puede ser que un hombre tenga tanta importancia como para recibir una comisión del Rey de reyes! ¿Lo apartará la ambición mundana del cometido sagrado, de la santa comisión?” (MS 2:190).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

1. Medita en la vida de Saúl, y te preguntarás cómo alguien que ha recibido tanto puede desperdiciarlo todo. ¿Qué lecciones obtenemos de su historia para nosotros? ¿Qué errores cometió que lo condujeron a la clase de acciones que vimos esta semana?

2. Medita en cómo Jesús, gracias a su humanidad, puede simpatizar con nosotros en nuestras luchas. ¿Por qué la humanidad de Cristo es tan importante para nosotros?

3. Si alguien de tu clase ha sufrido la pérdida de seres amados, ¿cuáles son algunas maneras por las que ustedes pueden ayudarlo? ¿Qué pueden hacer más allá de solo hablar palabras de consuelo? ¿Hay casos donde no se puede hacer “nada más” que hablar palabras consoladoras?

4. Una de las grandes preguntas que han desafiado a los pensadores cristianos durante siglos es la idea del preconocimiento de Dios y nuestra libre voluntad. Si Dios conoce nuestras elecciones de antemano, ¿somos realmente libres al hacerlas? Si no, ¿dónde está la libertad personal, entonces? Y si no tenemos libertad, ¿cómo podremos ser juzgados y castigados con justicia por nuestras acciones? Algunos, para obviar este tema difícil, alegan que algunas de nuestras acciones tienen que ser desconocidas para Dios o, si no, esas acciones no podrían ser libres. Otros no ven problema aquí: el que Dios conozca lo que una persona hará no afecta de ninguna manera la libertad de esa persona para tomar decisiones.

En la clase, analicen estas preguntas, aunque no será fácil resolver estas cuestiones. Lo importante es saber que somos seres libres pero que, aun respetando nuestras elecciones libres, Dios está en el control.